Eres una tortura cariño. Y mientras me despierto a media noche empapada en sudor por esta maldita enfermedad que me acaba poco a poco no puedo evitar recordar lo que fue de nosotros, lo que quedó y lo que perdimos. Supongo que las esperanzas se fueron finalmente cuando decidiste matarme así, abandonándome a mi suerte y a la maldición que tu mismo me otorgaste, o tal vez siempre fue así. Sí. Siempre fue así. Siempre fuimos de este modo. Ciegos. Ésta fue nuestra decisión y jamás pensamos que terminaría así. Lo lamento por Camila. Jamás podrá conocer quien eras realmente y eso me apena...llegará el día que pensará que todo lo que dije es mentira y que su padre es un héroe. Y lo es. El mejor de los asesinos. Ya sufrirás cariño. Y reiré en tu rostro cuando eso pase. Y si aún me quedan fuerzas, bailaré sobre tu tumba. Aunque a Camila le moleste.
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